Industrias y zonas de gran amplitud

El principio de los paneles radiantes se adapta perfectamente a los edificios de techos altos, muy habituales en el sector industrial. Para empezar, no se producen pérdidas de calor entre el panel y el suelo, dado que los paneles radiantes sólo generan calor cuando chocan con una superficie. Además, las naves industriales suelen estar divididas en zonas, cada una de las cuales tiene sus propios requisitos de temperatura. Con los paneles radiantes, el calor se puede dirigir allí donde se necesita para crear zonas a diferentes temperaturas.